Las historias y personajes de este nuevo libro de Eber Zorrilla tienen como marco común la marginalidad y la violencia política que golpeó a muchos pueblos del interior. Con un lenguaje fresco, los cuentos nos conducen por diversos escenarios en los cuales lo trágico se confunde con lo cómico, con giros mordaces para vapulear a una sociedad que sigue ignorando sus deficiencias, donde campea el desasosiego, los recuerdos del pasado violento, la infancia interrumpida, la soledad y la marginalidad, así como la corrupción y las marcadas diferencias sociales que aun están presentes.